Como sirvientes y auxiliares de los Haemonculi, los Wracks son aborrecibles ejemplos de la pericia quirúrgica de sus amos, pues cada uno de ellos ha sido rajado y vuelto a "montar" convertido en un instrumento andante de tortura. En el campo de batalla defenderán a su creador sin importarles su propia vida, usando todo tipo de armas tan exóticas como turbadoras.
Este kit de plástico de 86 piezas permite montar cinco Wracks. Cada Wrack puede ir equipado con una gran variedad de armas, incluyendo filos acabados en ganchos, mazas reforzadas, 1 rifle licuador y 1 osificador. También contiene once cabezas, tres de ellas diseñadas para el Acothyst.
Cada kit también incluye dos sets de brazos adicionales que te permitirán convertir un Wrack en un piloto de Raider, tal y como puedes ver en la galería de imágenes.